En este artículo vamos hablar de una iniciativa de artesanía ecológica muy interesante. Un proyecto que crea un producto único y bonito, respetando el medio ambiente.
Me encanta la frase ,todo empieza con una semilla, y para hablarnos de su camino, contamos con el artesano que nos cuentará un poco como empezó todo y su filosofía de proyecto.
Esta es su historia:
Todo comenzó en un viaje a Estambul que hice, visitando uno de los muchos bazares que hay allí, vi unas lámparas que vendían hechas con calabaza y no sé porque se me iluminó la bombilla y me prometí que eso tenía que hacerlo yo.

Estuve un par de días metiéndome entre callejuelas buscando esas calabazas o semillas pero me fue imposible, solo pude venirme con unos cristalinos que ellos usan para decorarlas…
Así que a la vuelta en Amurrio comencé a investigar un poco que calabazas eran esas y como podría plantarlas. Resulto difícil encontrar esas semillas que resultaron ser calabazas de peregrino y finalmente compre un sobre con semillas. Las cultive y el primer año se me dio bastante mal… (Nota desde HuertoGuerrilla.com: eso es porque no siguió la guía de iniciación del huerto urbano que tú puedes leer aquí 😉 ) …apenas recolecte una docena de calabazas, pero para empezar estaba bien, me compre una dremel y comencé a improvisar… Las primeras lámparas fueron «feuchas» pero poco a poco fui mejorando mi estilo hasta ahora que podéis ver algunas lámparas que para mí personalmente son maravillosas.